Agustina Aguilar (21) tenía dos hijos. La tarde del 7 de octubre de 2023 su mamá llegó y ya no había nada que hacer. Las versiones eran contradictorias y hasta que se realizó la autopsia la familia de la joven creyó lo que les dijeron: que ella había muerto de una sobredosis por el consumo de estupefacientes.
Las pericias determinaron luego que, en realidad, Agustina murió por asfixia mecánica. Alguien la había ahorcado usando algún elemento para evitar las marcas.
Carlos Costa (28), hermano mayor del futbolista Ayrton Costa (26), estaba con ella al momento de su fallecimiento. Tenía arañazos en el cuello y mordidas en los dedos. Él sostuvo que se trataban de heridas provocadas por la joven mientras él intentaba ayudarla durante las convulsiones. Pero, para los peritos, eran heridas defensivas.
Hacía apenas unos 15 días que Carlos había conseguido la libertad condicional con monitoreo electrónico después de cumplir tres de los 7 años y 8 meses de prisión que le impuso el Tribunal Oral Criminal (TOC) N°5 de Quilmes por siete robos.
Al momento del femicidio de Agustina, el único imputado del caso residía en un departamento construido justo arriba de la casa de su madre y de su hermano, en la calle Sargento Cabral al 700, de Bernal.
Este lunes empezó el juicio por el crimen de Agustina Aguilar. Los jueces Alberto Ojeda, Pablo Pérez Marcote e Isabel Cerioni, del TOC N° 4 de Quilmes, deberán decidir si el acusado, que tenía denuncias previas por hostigamiento y violencia contra la joven, es responsable del femicidio. O si, como declaró el defensor, murió por una intoxicación producto del consumo de estupefacientes.
“Ellos la quisieron dar vuelta, quieren decir, que mi sobrina murió por el consumo de drogas, pero las pruebas dicen otra cosa. Mi sobrina no era una adicta, ella tenía droga en sangre, sí, pero nunca jamás le vi un indicio, un rasgo de consumo. Yo la veía, mis sobrinos iban a un colegio privado, nunca faltaban, ella los tenía cuidados”, le dijo a Clarín Alejandro, el tío de la joven.
El primer día del juicio declararon los padres y la hermana de Agustina, además de Alejandro. También tres peritos y el futbolista Ayrton Costa, por videollamada.
“La teoría de la defensa se contradice con el resultado de las pericias que son coincidentes en que Agustina falleció producto de una asfixia mecánica”, aseguró a Clarín Juan Carlos Feustel, el abogado que representa a la familia de la víctima.
Feustel no descartó que -luego de escuchar al resto de los testigos- pudieran pedir que se investigue si Ayrton Costa incurrió en el delito de falso testimonio. “Lo estamos analizando”, aseguró.
“Las cosas no son como cada uno cree que son, son como aparecen en el expediente. Para poder saber si hubo falso testimonio debe ser cotejado con otros testimonios. Hasta ahora sus declaraciones son incongruentes con la prueba: uno dice blanco y el otro dice rojo”, analizó el abogado.
Es que el jugador de Boca dio su versión de los hechos y, siempre de acuerdo a su declaración durante el debate, él acudió al pedido de ayuda de su hermano y habría visto cuando la joven convulsionaba, a su hermano sosteniéndola con las manos en la boca y con el brazo cortado “por la creencia de que a una persona con sobredosis hay que cortarla para liberar la presión de la sangre”, explicaron a Clarín fuentes cercanas al imputado.
Lo cierto es que Ayrton Costa se ubicó en la escena del crimen al momento de los hechos y será motivo de debate si dice la verdad, si mintió para defender a su hermano o si, efectivamente, vio el ataque.
En tanto, la defensa presentó este un informe del criminalista Enrique Prueger que habría cuestionado elementos de la pericia oficial y de la recopilación de pruebas.
El perito declaró que “no se respetó” el Protocolo de Minnesota sobre la investigación de muertes potencialmente ilícitas, un estándar internacional elaborado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que establece cómo deben investigarse las muertes que pueden haber ocurrido por uso ilegítimo de la fuerza, ejecuciones extrajudiciales, arbitrarias o sumarias.
Además puso énfasis en el consumo de drogas pero, cuestionado por el abogado de la querella, aseguró que “no era médico y no podía diagnosticar la causa de muerte”.
Esta discrepancia será la clave en lo que queda de juicio que tendrá una nueva audiencia este viernes con peritos y testigos de la defensa.
Por su parte, Feustel anticipó que citarán a otro perito que participó de la autopsia (ya declaró uno) para interrogarlo sobre dicha, justamente el punto controvertido por la defensa.
Mientras que en la audiencia del 22 de septiembre se definirá la fecha de alegatos y veredicto.