Un hombre de 47 años fue asesinado a balazos por motochorros que intentaron robarle la moto cuando circulaba por el Camino del Buen Ayre, a la altura de Ituzaingó.
El violento episodio ocurrió este lunes cerca de las 22, cuando Rubén Ariel Restagno regresaba junto a su pareja de una quinta en Moreno y se dirigían hacia su casa en el partido de San Martín. La víctima era dueño de una conocida pizzería en la zona.
Según informó Primer Plano Online, la víctima fue emboscada a la altura del kilómetro 12, en sentido hacia la autopista Panamericana. Dos delincuentes a bordo de otra moto lo interceptaron y lo obligaron a detenerse. Uno de ellos, que iba de acompañante, se bajó para amenazarlo y que frente.
La pareja de Restagno, una mujer de 28 años, logró huir corriendo hacia la banquina. El empresario pizzero, que tenía autorización para portar un arma, intentó sacar su revolver para defenderse. Los ladrones, al verlo armado, abrieron fuego de manera inmediata y le pegaron cinco tiros, uno de ellos en la zona intercostal izquierda, que le provocó la muerte en el lugar.
Los agresores se dieron a la fuga sin llevarse la Honda Falcon 400 de la víctima. La causa la investiga la UFI N°2 descentralizada de Ituzaingó, con el expediente a cargo de la fiscal María Alejandra Bonini. Según confirmaron a Clarín fuentes cercanas a la familia, los propios investigadores confirmaron que se trató de un intento de robo.
Los ataques incluyen disparos, una acción rápida y motos de alta cilindrada. Estas son la principales características de los robos que sufren los motociclistas que transitan las diferentes autopistas del Gran Buenos Aires, en especial la Panamericana, que une CABA con la zona norte del conurbano.
La autopista Panamericana tiene una extensión de unos 50 kilómetros que unen la Ciudad de Buenos Aires con la zona norte de la provincia. Los principales partidos que atraviesa son San Isidro, Escobar, Pilar y Tigre. Como es parte de la ruta nacional N° 9 tiene jurisdicción tanto Gendarmería Nacional como la policía bonaerense.
“Es un delito interjurisdiccional, pasa en las trazas de todas las autopistas. Son hechos muy violentos donde siempre hay disparos. En zona norte había bajado este tipo de delitos”, detalló la fuente consultada.
Otro detective agregó que los lugares de donde provienen los ladrones son variados ya que “se encuentran cerca de barrios de San Martín, San Isidro o Pilar, y, muchas veces, también son ladrones que vienen desde Capital”.
Por lo general, los asaltos son cometido por entre dos y cuatro motochorros. Utilizan motos de alta cilindrada -de 300cc. para arriba- u otros modelos que sean versátiles y de rápida respuesta como, por ejemplo, la Honda Tornado 250cc.
“Las motos con las que van a robar también son robadas. Usan la Tronado 250cc. porque son ágiles, todo terreno, rápidas para escapar y andan entre los otros autos”, explicó la misma fuente.