La aparición de tres cuerpos en la ruta 228, en el sur de la Provincia de Buenos Aires, reveló una historia impactante. Un hombre mató a su mujer en su casa de Tres Arroyos, subió a los hijos a su auto y lo chocó contra un monte. Pero como sobrevivieron, los ahogó en una zanja y después intentó suicidarse yendo a buscar un arma. No la encontró y terminó tirándose abajo de un camión.
Todo se descubrió este mediodía luego de que un hombre se suicidara arrojándose abajo de un camión en la ruta 228, a la altura del kilómetro 65, partido de San Cayetano. Cuando la Policía fue al lugar, descubrió que a pocos metros había una Renault Duster chocada contra un monte. Cerca del vehículo, dos chicos ahogados en un zanjón.
De acuerdo a las declaraciones de algunos testigos, “un hombre habría intentado quitarse la vida al estrellar su automóvil contra un monte. Al no poder concretar el hecho, ingresó a un campo en busca de un arma de fuego, sin lograr su cometido”. En una situación de desesperación, se habría arrojado debajo de un camión.
Según se conoció minutos más tarde, a la vera del camino se hallaron los cuerpos de otras dos menores de edad y los investigadores buscan a una cuarta, que podría ser una mujer.
De acuerdo a lo que investiga la Policía de Quequén, el hombre que perpetró el triple homicidio es Fernando del Archiprete (40), que asesinó a su esposa Rocío Noemí Villarreal (24) y a sus hijos Tiziano (8) y Francesco (4). La persona que manejaba el camión Mercedes Benz que embistió al hombre fallecido es Jonathan Alfredo Luna (36).
Unos metros campo adentro de donde resultó la colisión, los investigadores encontraron un Renault Duster sin ocupantes, aparentemente despistada y a metros de allí, en un zanjón se encuentran los cuerpos sin vida de dos menores sin identificar.
Los peritos que se encuentran en la zona están averiguando las causales de la muerte, pero según trascendidos, el hombre mató a su esposa en Tres Arroyos, subió a sus hijos al auto y con su vehículo intentó suicidarse estrellando la Duster contra un monte, pero sin lograr su cometido. A los chicos, aparentemente malheridos, los ahogó en un zanjón y el hombre con el objetivo de terminar con su vida, se tiró bajo un camión.