Un joven de 16 años fue asesinado de un balazo en la cabeza este viernes por la madrugada en Rosario, luego de encontrarse con otra persona que le disparó después de un breve intercambio.
La víctima, identificada como Thiago González, aparecía mencionado como presunto partícipe del crimen del subinspector Leoncio Bermúdez, asesinado en noviembre de 2023 en el hospital Provincial.
El ataque de este viernes se produjo en la zona de Caupolican al 200, en la zona sur de Rosario, cerca de las 3 de la mañana. González llegó allí en taxi y se encontró con su atacante, que lo venía esperando. Tras el balazo, el joven pidió que se lo lleven en el coche, pero se desvaneció a los minutos.
“La primera hipótesis es que el disparo lo recibió dentro de la unidad, por la sangre que hay en los asientos. Entendemos que iba en el asiento del acompañante, de todas formas es parte de la investigación”, señaló el fiscal a cargo del caso, Alejandro Ferlazzo, en el programa Cada Día (El Tres).
El conductor quedó demorado para pedirle más información, ya que al momento de ir a indagarlo se encontraba limpiando la sangre del coche. “Hablamos de una persona que conducía un taxi y esa persona sería quien habría dejado el cuerpo donde finalmente se encontró”, explicó Ferlazzo. El hombre no llevaba ni un mes trabajando en el coche.
“Lo único que me dijeron es que el auto está implicado en un homicidio porque encontraron sangre. El chofer del turno noche trajo el auto para hacer el relevo con el chofer del turno mañana. Estaba muy nervioso y el del turno mañana notó algo raro, entonces llamó a la policía”, contó la mujer dueña de la licencia del coche.
González estaba señalado por haber sido presunto campana en el asesinato del oficial Bermúdez (42) a quien atacaron cuatro sicarios. Bermúdez era subinspector y fue quien se acercó corriendo hasta el Hospital Provincial de Rosario para interceder ante la irrupción de cuatro personas que llegaron armadas en busca de un preso que había sido internado allí. En la puerta, antes de ingresar, se topó con uno de ellos que -sin mediar palabra- le disparó a sangre fría y lo mató.
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Al menos cuatro personas ingresaron armadas y por la fuerza con la intención de asesinar a un preso que estaba siendo atendido, pero mataron a un policía que realizaba tareas de vigilancia.
Esa dramática escena, en la cual uno de los hombres se llevó por delante al agente mientras escapaba corriendo y lo atacó a balazos, quedó registrada en una cámara de seguridad. El oficial no pudo hacer nada y quedó tendido en la vereda sin poder levantarse.
Bermúdez recibió un disparo en el cráneo y fue trasladado en estado crítico al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca). Ingresó con un paro cardíaco y murió poco después
A pocos metros, en la garita, estaba su hija de 10 años, que estaba esperando que la fuera a buscar su mamá.
El preso que estaba internado en el hospital era Gabriel Guillermo Lencina (29), condenado a 22 años de prisión por homicidio. Creen que habían ido a rescatarlo.