El oficialismo de Salta obtuvo este domingo una importante victoria en las elecciones legislativas locales y casi duplicó en votos a su perseguidor directo, La Libertad Avanza (LLA). En el consolidado total, la fuerza que comanda Gustavo Sáenz exhibió un 43% de los votos, frente al 23% de los libertarios.
La jornada formó parte del super domingo en el que también acudieron a las urnas Chaco, San Luis y Jujuy para renovar cargos locales. En la provincia que gobierna Sáenz, su frente, Unidad de los Salteños, obtuvo 276.078 sufragios contra el 147.791 que cosechó LLA.
Amplia victoria del oficialismo salteño en las elecciones
Concretamente, el sistema utilizado fue el de Boleta Electrónica, por lo que los resultados estuvieron poco tiempo después de finalizado el proceso.
En un domingo donde no se reportaron inconvenientes, el oficialismo provincial obtuvo 11 de los 12 senadores que se renovaban y 20 de los 30 diputados que estaban en juego.
LLA se impuso en la capital provincia y cosechó un senador y 9 diputados, mientras que el “liberblue” Frente Liberal Salteño se quedó con un diputado provincial. El peronismo del Frente Justicialista Salteño -PJ intervenido- se quedó con las manos vacías.
Conocidos los datos, Gustavo Sáenz celebró los resultados y sacó pecho por haber obtenido 11 de las 12 bancas en el Senado provincial y 20 de los 30 escaños en Diputados.
“Me hubiese encantado ganar los 12 senadores” en juego, aseguró el mandatario salteño. “Vamos a seguir peleando juntos para seguir transformando nuestra querida provincia”, indicó Sáenz.
Luego de que se conociera la victoria de La Libertad Avanza en la capital salteña, el gobernador sostuvo: “Yo no se cómo se leen las elecciones provinciales, las legislativas, pero si de 12, ganamos 11, creo que ganamos 11 a 1, no? Si de 30 diputados, ganamos 20, creo que ganamos, no?”.
El mandatario salteño festejó los resultados junto a los candidatos locales en el comando de campaña de su espacio, donde envió otro mensaje a nivel nacional: “A los salteños no nos dicen lo que tenemos que hacer desde Buenos Aires”.
El mensaje del norteño tuvo una doble lectura. Por un lado, apuntó al armado del presidente Javier Milei, quien decidió jugar en el comicio. Por el otro, a la intervención del Partido Justicialista local, ordenada por la jefatura nacional de Cristina Kirchner.