Golpeado, Atlético Mineiro descontó en el arranque del segundo tiempo a través del chileno Eduardo Vargas. Sin embargo, nunca pudo encontrar claridad en ataque, y no pudo llegar al empate. Por el contrario, en la última jugada del partido, Botafogo liquidó el encuentro con un contraataque que terminó en gol de Júnior Santos, para el 3-1 definitivo.